Tarta tres chocolates

 

Cuando quieres hacer un postre para una cena pero no sabes qué cocinar, toca recurrir a nuestro salvador: el chocolate. Normalmente suele gustar a todo el mundo así que para esta ocasión me decanté por la tarta de 3 chocolates. Una combinación de chocolate negro, con leche y blanco. Una delicia para los sentidos.

Esta receta es de esas que siempre va de boca en boca ya que su preparación es bastante sencilla, los ingredientes son fáciles de encontrar y no requiere mucho tiempo. Lo único ‘negativo’ es que tendréis que esperar un poco para provarla ya que ha de refrigerarse durante bastantes horas.

Ingredientes:

150 gr de chocolate negro (70% cacao mínimo)

150 gr de chocolate con leche

150 gr de chocolate blanco

1 paquete de galletas tipo maria

60gr de mantequilla

3 sobrecitos de cuajada

750ml de leche

750ml nata liquida

Azúcar

Lo primero que se ha de hacer es picar bien las galletas mientras se deshace la mantequilla en un vaso en el microondas. A la galleta picada le añadimos la mantequilla y la vamos amasando hasta que se ligue toda la galleta. Si veis que queda muy ligera se ha de añadir una cucharada de leche para que así se humedezca bien toda la galleta.

Colocamos toda la galleta en el interior de un molde desmoldable y la chafamos con los dedos o nudillos hasta conseguir una base uniforme y lo más lisa que se pueda hacer. Una vez se ha completado este paso dejamos reposar el molde con la galleta en la nevera mientras vamos realizando los siguientes pasos.

Ahora es el momento de hacer la preparación de los chocolates. Primeramente empezaremos por el chocolate de 70% cacao. Se ha de poner a cocer 250ml de nata a la cual iremos incorporando poco a poco el chocolate sin dejar de remover.Si se quiere dar un poco de dulzor al chocolate, se le añade un poco de azucar a gusto a la nata, pero se puede dejar tal cual. Por otro lado debemos diluir un sobrecito de cuajada en 250ml de leche e incorporar a la cocción de la nata y el chocolate. Continuar con la cocción sin dejar de remover hasta que espese. Retirar del fuego sin dejar de remover hasta que enfríe un poco y ayudarse de un cucharón para verter el chocolate sobre la galleta, para evitar que el chocolate caliente dañe la base de galleta.

Hecho esto dejamos el molde otra vez en el frigorífico mientras preparamos el siguiente chocolate siguiendo el procedimiento anterior. Antes de volver a verter el chocolate sobre el anterior, debemos pasar un tenedor ligeramente por la superficie para marcarlo. De esta manera, evitaremos que las capas de chocolate se deslicen entre ellas al cortar la tarta y en el último chocolate, que será el blanco, intentaremos dejar la superficie lo más lisa posible.

Después de todo este proceso se ha de dejar reposar el pastel. Se dice que con unas cuatro horas ya debe estar cuajado, pero yo como no me fio mucho, prefiero dejarlo toda la noche entera o si es posible un día entero.

La decoración de esta tarta puede ser muy variada: perlitas de chocolate, cacao en polvo, virutas de cualquier tipo… Yo, personalmente, me decanté por poner una base ligera de cacao en polvo y rallar un poco de los tres chocolates.